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No Branding, No Party

La importancia del branding y storytelling en las marcas de restauración: ¿Por qué deberías cuidar tu historia y tu identidad?



Cuando hablamos de restauración, el primer pensamiento de la mayoría suele ser la propuesta gastronómica o la ubicación del local (y el nivel de dolor del alquiler). Pero en la actualidad, ninguna marca será capaz de sobrevivir sin algo mucho más esencial: su historia. Para realmente conectar con tus clientes, debes emocionarles con tu historia: ahí entra en juego el branding.


Te contamos algunas de las claves desarrolladas para el proyecto Restaurante Lina, recién abierto en c/Fernando el Santo 25, que se ha convertido en un éxito en muy poco tiempo y detrás del que hay mucho trabajo y dedicación.

 

El Branding: Tu carta de presentación (más allá del logo) en el restaurante


El branding es mucho más que un logo bonito o un nombre molón. Es el conjunto de percepciones, sensaciones y valores que los clientes asocian con tu restaurante. Es cómo te perciben, cómo te conectan contigo y cómo te recuerdan. En un mundo lleno de opciones, tu branding es lo que te va a diferenciar de los demás. Y debe materializarse en cada punto de contacto con tu cliente. En cada detalle de tu marca offline y online. En cada mensaje. En cada intención. La coherencia es vital para que los consumidores confíen en una marca.


Para Lina, hemos desarrollado un branding coherente con su historia, una representación de todas las emociones y vivencias que hay detrás de sus fundadores. Una materialización del espíritu aventurero de Patricio Massimino (su chef y co-fundador) que transmite su talento para la alta cocina combinado con el espíritu acogedor y familiar de su hermano y co-fundador Diego Massimino.


Y la máxima expresión de este maravilloso proyecto es un claim que responde a la necesidad de explicar, en sólo tres palabras, la complejidad de una cocina que mezcla experiencias por todo el mundo, ingredientes poco habituales y técnicas culinarias del más alto nivel. Nos costó mucho englobar tanta vida y talento en tan poco espacio. Pero lo hicimos. Y nos encanta el resultado.


Mestizaje de Sabores.

 


Lina es el ejemplo de un branding cuidado, hecho con cariño y que representa la calidad de la oferta y experiencia que se encuentra allí (no en vano, este mes ha sido nombrado el mejor restaurante fusión de Madrid por The Fork). Un restaurante único que sin duda tendrá un largo recorrido en Madrid. Y que ha decidido contar su historia con nosotros.


Nuestro consejo: Cuenta tu historia. Pero cuéntala bien. La oferta gastronómica en España (y en este caso en Madrid) es cada día mayor y mejor. Necesitas crear vínculo emocional con tus consumidores. Y necesitas reflejar tu branding en todos y cada uno de los detalles que conforman tu restaurante. Solo los excelentes crean relaciones a largo plazo. Y solo las relaciones a largo plazo con tus consumidores garantizan el éxito.

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